Soneto de la tienda vieja
Habita entre una escalera y terraza
El clamor de oídos de un azul viejo,
Tallado en hueso de una calabaza
Silba algo el color pintado en añejo.
Una botella de ron y una hogaza
Quebrantado por el tiempo el reflejo,
En cristal polvoriento de una plaza,
La araña teje dentro del espejo.
Y la tienda conserva un calendario,
Y un rosario colgado de una balda,
Vacío y sucio abruma un insectario.
Mira dentro el baile duende sin tono,
Como mece tiernamente su falda
El espectro que habita el abandono.
Habita entre una escalera y terraza
El clamor de oídos de un azul viejo,
Tallado en hueso de una calabaza
Silba algo el color pintado en añejo.
Una botella de ron y una hogaza
Quebrantado por el tiempo el reflejo,
En cristal polvoriento de una plaza,
La araña teje dentro del espejo.
Y la tienda conserva un calendario,
Y un rosario colgado de una balda,
Vacío y sucio abruma un insectario.
Mira dentro el baile duende sin tono,
Como mece tiernamente su falda
El espectro que habita el abandono.