miércoles, 10 de junio de 2015

6:00 Am.
Yo, en un lugar de la memoria
Respiraba un invierno helado,
Olvidado en la yerba sola,
De paso febril de la aurora
Con alas azules cantando.
Mi ojo secaba en el recuerdo
Tan abstracto, tan firme, tan fugaz
Que el entendimiento valía poco
A su lado de incomprensible marea
De tanto caballo alado, tanta muerte,
Y tanto utensilio roto en desvanes.
Por eso hay un paso firme hasta ver clarear
El cielo por las manos y los rostros pintados
De una ciudad nacida junto al mar,
Los atropellados pasos de los corredores,
El perro, la sal, el agua, el café,
La radio, el coche y los tallos renaciendo
Y a lo lejos las nubes rojas y el sol asomándose.
Yo, en un lugar desde un latido
Musical, errando en la noche
Vi al soldado desconocido
Conocer su nombre perdido.
Yo solo, en la radio del coche.